domingo, 28 de febrero de 2021

Sobre el mundo


Polonnaruwa, la capital religiosa y cultural del pueblo cingalés, allá por los siglos XII y XIII, con su espléndido Vatadage, la capilla circular de las cuatro entradas, cuatro escalinatas y cuatro budas. Ese ambiente místico y espiritual que se vive en las dagobas, esas cúpulas esféricas donde la leyenda dice que están las reliquias de los dioses, esos que dan las respuestas a todas las dudas que uno pueda tener sobre el mundo. Meditación y reflexión para tiempos extraños, aunque haya que recorrer nueve mil kilómetros para darse uno cuenta de cosas que, en el día a día, se le escapan.

Sri Lanka, la isla del té y la canela, donde la naturaleza produce arroz, cocos, tabaco, mangos, pimienta, vainilla, ébano y piñas. Donde cuidan a los elefantes y nadan cocodrilos y vuelan garzas. El lugar ideal para disfrutar de la medicina ayurveda, remedio de todos los males. Las cuevas con estatuas, las paredes con pinturas, las rocas con restos de edificios. Huella portuguesa, holandesa y británica. De budismo como estilo de vida, como filosofía moral, como actitud ante los demás. Cuando el viaje, más que aventura, es toda una experiencia.

sábado, 27 de febrero de 2021

Sentado


Polonnaruwa, una de las ciudades sagradas de Sri Lanka, nos reservaba una maravillosa sorpresa: cuatro budas esculpidos en un fragmento de roca. De izquierda a derecha vemos los dos primeros sentados, en postura de meditación; el tercero de pie, con los brazos cruzados sobre el pecho y, el cuarto, el más grande de todos, tumbado, en la posición denominada nirvana. Son los budas de Gal Vihara, una de las obras escultóricas más conocidas del país.

La figura acostada mide catorce metros de larga; la que está de pie, siete metros. Los sentados, uno es más grande (foto) y el otro, más pequeño, labrado dentro de un hueco de la roca a la manera de una capilla, que se enmarca con dos columnas y protegida por una verja de hierro. Parece ser que estos budas fueron trabajados en el s.XII, época en la que Polonnaruwa era la capital del país. Por aquella época era el centro religioso y comercial del pueblo cingalés, gracias a la dedicación de Parakramabahu I, que reinó entre 1153 y 1186, impulsor de la agricultura y de los pantanos. El esplendor de Polonnaruwa duró hasta el siglo siguiente.

lunes, 22 de febrero de 2021

Símbolo espiritual


En el Templo del Diente de Buda de Kandy, los golpes de tambores y el rumor de las flautas protegen la reliquia sagrada en la que se apoya la espiritualidad de todo un pueblo. Este templo fue construido en estilo clásico europeo, bajo el mandato del rey Vira Narendra Sinha a principios del s.XVIII, con añadidos posteriores. Según la leyenda, alguien rescató un diente de Buda en la misma pira funeraria del Maestro allá por 483 a.C en la India y, ya en el s.IV, esta reliquia sería trasladada en los cabellos de la princesa Hemamala a Sri Lanka, escondiéndola en Anuradhapura, por entonces la capital. Blancos muros y tejado de pizarra definen la estructura del edificio, llamado Vahahitina Maligawa, donde con el paso de los siglos, quedaría resguardado el diente en una urna dorada en una capilla. Los fieles ofrecen flores que depositan en una enorme mesa.

Una vez al año, hay un festival por las calles de Kandy con bailarines, músicos, malabaristas con bengalas y hasta elefantes, en una auténtica procesión budista. Suele ser en verano y dura 10 días. El motivo, lógicamente, es venerar el misterioso tesoro, símbolo espiritual y mágica creencia.

domingo, 21 de febrero de 2021

Árbol sagrado


En Anuradhapura, una de las ciudades antiguas de Sri Lanka, contemplamos el Sri Maha Bodhi, árbol sagrado y punto de devoción de los fieles. Este lugar fue capital de los reinos cingaleses entre los siglos IV a.C y XI d.C. El árbol ha crecido a partir de un esqueje de la higuera de Bodhgaya, en India, bajo la cual Buda obtuvo la iluminación. Desde que brotó ha sido protegido y venerado, incluso durante las invasiones de los hindúes, ya que el budismo es una religión tolerada allí. El rey Devanampiya Tissa, allá por el s.II a.C., fue el que plantó el árbol y el impulsor de Anuradhapura. Sus hojas en forma de corazón son todo un símbolo de paz y armonía, justo lo que se siente con el roce del aire en sus ramas. Posiblemente sea el árbol más antiguo del mundo.

Ruinas de palacios, dagobas en forma de campana (blancas o de ladrillos ocre), monasterios con vatadage (capilla budista), una imagen de un Buda sentado del s.IV, los Estanques Gemelos... todo lo que contiene la ciudad ancestral está rodeado de enormes embalses.

sábado, 20 de febrero de 2021

Casas coloniales


Galle está al sur de Sri Lanka. En la costa, rodeado de hermosas playas. Su encanto reside en su casco histórico amurallado por los colonos holandeses. Su fortaleza y sus edificios coloniales han permitido que esta ciudad esté declarada Patrimonio de la Humanidad (1988). Sólidos bastiones protegen el corazón de la ciudad del azote del mar y de la furia del enemigo. Hay dos museos: el Nacional y el Marítimo, y un faro enorme pintado de blanco. Hay templos budistas e hindús y mezquitas. También entramos en la iglesia anglicana de Todos los Santos (construida en 1871 con piedra de la región en el lugar donde, dicen, están las tumbas de los primeros colonos).  Y una Torre del Reloj de principios del s.XX.

Desde finales del s.XVI Sri Lanka ha sido dominio portugués, holandés y británico. Hasta su independencia en 1948. Esas huellas históricas han dejado un poso estético en los edificios que vemos, sobre todo en una ciudad estratégicamente situada frente al Océano Índico. En Good Garving Restaurant comimos arroz, pescado y verduras.

viernes, 19 de febrero de 2021

Dorada bendición


El Golden Temple de Dambulla es el aperitivo que uno disfruta antes de visitar lo que verdaderamente importa: las cinco cuevas que se encuentran al abrigo de una roca y que contienen un total de 150 estatuas de Buda (con origen en el s.I a.C.). Es una montaña a 160 metros de altura, pero antes de ascender por los escalones, está el llamado Royal Rock Temple, museo y lugar de oración a partes iguales. El Golden Temple fue terminado de construir en el 2000 gracias a donaciones de Japón y tiene una curiosa estética kitsch que lo hace entrañable. La puerta de entrada es la boca de un león. En un entorno de piedras y vegetación, a la manera de un jardín gigante, numerosas figuras en fila india vestidas con hábito de color naranja, se encaminan hacia la enorme estatua dorada. De este mismo tono, al lado, hay una dagoba enorme con la forma característica de campana.

Dambulla se encuentra en el centro Sri Lanka. El budismo se basa en la renuncia al deseo, es un código moral de la vida. Buda (s.VI a.C) se enfrentó a la ley dominante en la India exponiendo su teoría de alcanzar la iluminación y procurar la liberación de las pasiones para purificar al ser humano. En el s.IV a.C un diente de Buda llegó a esta isla y hoy día se venera en la ciudad de Kandy.

miércoles, 17 de febrero de 2021

Un dios guardián


En nuestro recorrido por las calles de Kandy, pasamos delante del Kataragama Devalaya, uno de los cuatro santuarios más importantes de la ciudad, asociados al Palacio Real y al Templo del Diente de Buda. Éste es el único que está dirigido por hindúes. A menudo la gente acude a estos edificios para pedir ayuda en temas familiares, personales o del trabajo. Kataragama es una aldea (situada cerca del Parque Nacional de Yala) que es muy popular entre la población del país ya que su dios es venerado por budistas, hinduístas, musulmanes y veddas (hinduísmo antiguo) y acuden allí en peregrinación. También Kataragama es el nombre del dios guardián y protector 

En Kandy se encuentra la reliquia más importante del budismo: un diente de Buda. Los abarrotados mercados de la ciudad, repletos de especias y artesanía, son uno de los atractivos del lugar. Le compramos en la calle a un señor unas frutas en forma de semilla llamadas galsiyambalas, que es la leguminosa del tamarindo de terciopelo (por la textura sedosa de la cáscara). Kandy es una ciudad montañosa con un lago construido a principios del s.XIX.

martes, 16 de febrero de 2021

Marchitar el té


El té de Sri Lanka lo suelen recoger tradicionalmente mujeres tamiles (de la India) que, por su manera de trabajar, son las candidatas ideales para ese oficio. En Kandapola, en la Heritance Tea Factory, les vimos faenando. Venían con sus hojas de té en cestos que depositaban en la máquina de marchitamiento (que va a 360 revoluciones por minuto), para que el fruto madure al recibir aire caliente y comience su proceso de producción. Los ventiladores marchitan la hoja de té verde. La antigua gran factoría ahora es más modesta (con una labor meramente pedagógica) pero, a cambio, tienen un hotel de lujo.

El paisaje de Nuwara Eliya (la ciudad más grande de la zona) es fascinante. Cumbres verdes a casi dos mil metros de altura donde casi siempre hace fresco o directamente frío. Las brumas envuelven las montañas y se crea un paisaje húmedo y misterioso. Fue en el s.XIX cuando los ingleses llegaron aquí (James Taylor tuvo su primera plantación de té en Kandy allá por 1867). Dos siglos después, la manera de arrancar las tres últimas hojas de la planta es igual. La diferencia del precio que se paga a las trabajadoras y del que reciben los comerciantes al vender la mercancía es brutal. 

sábado, 13 de febrero de 2021

La cima del mundo


La montaña sagrada de Sigiriya se eleva hasta 370 metros. Desde allí se tienen unas maravillosas vistas de Sri Lanka, la isla del té y la canela. En este lugar, en el s.III a.C. se instalan las primeras comunidades monásticas budistas, buscando refugio en las grutas excavadas en las rocas. Hasta el s.XIV en que los monjes la abandonaron, Sigiriya es parte de la leyenda del lugar donde construyó una fortaleza el rey Kassapa, allá por el s.V, después de asesinar a su padre. Según se interpreten los frescos de las pinturas que hay en las rocas con mujeres de esa época con los pechos al aire, pueden ser cortesanas o diosas, según la fantasía de cada uno. 

La cumbre de la roca es plana, tiene una extensión de 1, 6 hectáreas y tiene restos y cimientos de diversos edificios y estanques (parece ser que para uso religioso). De acuerdo a las excavaciones, parece que fueron viviendas residenciales más que militares. Esculpidas también están unas garras de león, que es lo que queda de una espectacular imagen que debió existir. Escalinatas conducen a tronos de piedra donde es fácil sentirse el dueño del mundo. 

martes, 9 de febrero de 2021

Olores y colores


Piña, papaya, banana, fruta de la pasión, guayaba, sandía, coco, plátano rojo, manzana de madera, fruta de jack, fruta del dragón, mango... Todos los sabores, olores, texturas y colores del mundo estaban en los puestos de frutas de Sri Lanka. Aquí la cámara se detuvo en las nabos y puerros de un mercado de Negombo, pueblo marinero en la costa occidental. La ciudad tiene una fortaleza holandesa del s.XVII y un canal que atraviesa la ciudad y que tiene casas en el borde y barcas. Además del mercado de frutas y verduras, estuvimos en el de ropa y en el de los pescadores, verdadero termómetro de la actividad local.

El plato típico del país es el rice curry. El arroz se acompaña de una serie de condimentos o guarniciones más o menos especiadas. Verduras, dhal (sopa de lentejas), mango chutney, calamares, gambas, ladyfingers (entre judía verde y pimiento), sardinas... acompañado de papadum, una masa de pan crujiente perfecto para mezclar con la comida. 

domingo, 7 de febrero de 2021

Pescadores zancudos


En el sur, camino de Galle, vimos en la playa a los pescadores zancudos. Hombres subidos a un palo con su caña en la mano esperando que pique algún pez, sentados en otro palo perpendicular. Van preparados con su bolsa para coger lo que vaya cayendo. Hasta el tsunami de 2004, que arrasó las costas de Sri Lanka y trastocó la vida cotidiana de la población, parece ser que ésta era una profesión muy habitual. Pero hoy día, la presencia de los hombres subidos en palos es una actividad puramente testimonial. Incluso en las cercanías de las ciudades más visitadas su puesta en escena es simplemente para que les puedas hacer una foto y pedir una propina por ello. Sobre todo, porque la mejor hora para pescar es al amanecer y al atardecer. 

En Galle probamos uno de los platos tradicionales del país: mallung. Consiste en unos curiosos tallos verdes picados y salteados con agua, coco rallado, cebolla, sal, chile y curry. Estas originales verduras locales pueden ser hojas de maracuyá, espinaca de agua o berros.

sábado, 6 de febrero de 2021

Té Mackwoods


Camino de Nuwara Eliya, visitamos la plantación de té Mackwoods. Fue fundada en 1841 en la zona llamada Labookellie Estate por el capitán de la marina británica Sir William Mackwood y actualmente tendrá unas 11.000 hectáreas de colinas repletas de plantas. De ellas, una vez a la semana, las trabajadoras de manos pequeñas (suelen ser de procedencia tamil, de la India) recogen solo las tres últimas hojas (a veces solo una) para que la producción sea lo más selecta posible. Dos de las variedades más apreciadas del té son el green (verde) y el bop (broken orange pekoe). El segundo hace alusión a las hojas de té negro trituradas de un color parecido al naranja futo de la oxidación. La clasificación de los tés negros es: bopf (fuerte), bop (medio) y pekoe (suave). Los procesos en la elaboración del té son: marchitado, laminado, balanceo, fermentación, secado, clasificación y empaquetado. Actualmente Mackwoods está presidida por Chris Nonis, médico y diplomático, nieto del empresario de Sri Lanka cuya propiedad arrebató a los británicos en 1956. Es una compañía comprometida con el medio ambiente según sus proyectos hidroeléctricos y de reforestación. 

La sopa diyabath es un desayuno que acumula energía para todo el día. Está hecha de arroz y leche de coco a la que se le añade una pizca de lima, cebolla, chile verde y ajo. Tiene efecto antiinflamatorio y es uno de los platos tradicionales de la gastronomía local. 

miércoles, 3 de febrero de 2021

Fe y oración


Alrededor del 9% de la población de Sri Lanka son musulmanes. La mezquita Ul Alfar es una de las más interesantes de Colombo. Al menos, una de las más llamativas, debido a su fachada decorada con franjas blancas y rojas. Fue construida en 1909 y tiene unas cúpulas en forma de granadas muy espectaculares. Este culto tiene su origen en la llegada de comerciantes árabes con las ideas religiosas de Mahoma, allá por el s.VII. La profesión de fe, la oración, la ayuda a los pobres, el ayuno y la peregrinación a los lugares sagrados son algunos de los pilares en los que se apoya esta religión. En las mezquitas hay que descalzarse y llevar el cuerpo cubierto. 

Una de las delicias en los desayunos de Sri Lanka es el kiribath, que es un plato preparado con arroz cocido en leche de coco. También probamos el roti (pan de trigo con forma de tortilla) y los noodles (fideos con verduras). No hay como comenzar el día con una buena reserva de energía.

martes, 2 de febrero de 2021

Equilibrio y destino


Aproximadamente un 16% de la población de Sri Lanka practica el hinduismo. Aquí llegó con los emigrantes del sur de la India (tamiles) y, en general, con la enorme influencia cultural que el gran país ejerce sobre la isla. Los principios esenciales del hinduismo son el dharma (equilibrio del cosmos de acuerdo a cómo nos comportamos) y el karma (el destino que toca por lo que uno lleva arrastrando). En nuestro paseo por Colombo, en 1st Cross Street, descubrimos la portada de Sri Sammangodu Kathirvelayutha Swamy Kovil, que tiene santuarios dedicados a Shiva (el dios de la regeneración) y Ganesh (cuerpo humano y cabeza de elefante). La decoración exterior también cuenta con multitud de elefantes con adornos dorados en la cabeza. La entrada está presidida por dos caballos (con jinete) cuyas patas delanteras están siendo levantadas por una figura humana. Estamos en el barrio de Pettah, con sus calles llenas de comercios y su ambiente de mercadillo.

Uno de los postres más exquisitos de Sri Lanka se llama wattalappam y no es otra cosa que un flan de leche de coco y huevos. Eso sí, aromatizado con las más sutiles especias y decorado con anacardos picados.

lunes, 1 de febrero de 2021

Mente tranquila


En Lotus Road esquina York Street nos encontramos con Sri Sambuddhaloka Viharaya, que es uno de los monasterios budistas más importantes de Colombo. Tienen un buda dorado en la entrada y, cerca, una enorme dagoba blanca (con su peculiar forma de campana) que hace las veces de templo. El budismo es la religión más importante de Sri Lanka (más o menos un 70%), que siguen la escuela Theravada, la del sudeste asiático (como en Camboya). Practican la meditación como forma de desarrollo positivo de la mente. Los elefantes que decoran su pequeña tapia protegen el lugar.

No te puedes venir de Colombo sin desayunarte un hopper, que resulta ser un huevo frito presentado en una masa en forma de cuenco hecha de harina de arroz y leche de coco. Se le puede añadir pol sambol, que es coco rallado aliñado con cebolla, guindillas, limón y sal.