sábado, 11 de junio de 2022

Fatigas del Querer


Fatigas del Querer es una taberna situada en la calle de la Cruz, 17 y está decorada con el aire y el ambiente de Andalucía, incluidas maravillosas reproducciones en azulejos de cuadros de Julio Romero de Torres. Debe su nombre al estribillo de la bulería "Dame un poquito de agua" que inmortalizó Camarón de la Isla acompañado de la guitarra de Paco de Lucía. A lo largo del siglo pasado tuvo distintos dueños y periodos en que estuvo cerrada, pero fue en 2006 cuando se le dio el impulso para convertirla en un pedazo del Sur en Madrid. Su fachada con dibujos de las diosas clásicas llamadas Vinos y Viandas, pintadas sobre fondo amarillo es una invitación a pasar a un rincón tranquilo donde disfrutar de la música flamenca que siempre suena en el ambiente. A no ser que vayas a una hora punta y esté llena de turistas, claro.

Tienen salmorejo cordobés, ensaladilla rusa, croquetas de jamón, chipirones a la plancha, rabo de toro estofado y gambones a la plancha o al ajillo. Me senté en una mesa, un camarero muy amable me trajo mi caña (con unos trocitos de chorizo de cortesía) y me pedí una ración de tortillas de camarones (cuesta 6,50 euros). La barra es de madera labrada y en sus paredes hay pinturas al fresco y un par de esculturas talladas imitando los mascarones de proa de los barcos.

miércoles, 8 de junio de 2022

Almohadillado florentino


El Palacio de los Duques de Medinaceli en Cogolludo (Guadalajara) es de estilo renacentista y fue construido a finales del s.XV. para Luis de la Cerda, I Duque de Medinaceli. Es una obra diseñada por Lorenzo Vázquez Segovia, de inspiración italiana. Su fachada tiene la decoración almohadillada florentina y ventanas (seis) divididas por una columna. La portada está adintelada y tiene frontón. Encima está el escudo de la casa de Medinaceli abrazado por dos figuras con cuerpo de mazorca de maíz (planta que vino de América). Una restauración finalizada en 2012 ha consolidado dos patios (principal, con una hermosa galería de arcos y balconcillo con decoración plateresca, y de servicio), los jardínes y la tapia. Se ha descubierto una fuente y en una de las estancias hay una chimenea con adornos gótico-mudéjares.

En la visita guiada te explican la teoría de que Cristóbal Colón pudo nacer en Espinosa de Henares (Guadalajara), hijo de doña Aldonza de Mendoza, duquesa de Arjona, y presentado a los Reyes Católicos por mediación del I Duque (sobrino del poderoso Cardenal Mendoza). No nos vinimos de Cogolludo sin comprar unos mantecados de naranja de La Panadería de Palacio.

lunes, 6 de junio de 2022

Torre en lo alto


La iglesia de Santa María, en Cogolludo (Guadalajara), es una construcción de la primera mitad del s.XVI con tres naves (la central más ancha) separadas por pilares cilíndricos. Las bóvedas de crucería de los techos tienen espectaculares nervaturas de trazas del gótico tardío. La portada principal del templo es renacentista, con remate de frontón triangular, y está precedida de un atrio con escalinata y rejas. Adosada a un lateral de la nave se sitúa la torre, formada por cuatro cuerpos. En lo más alto hay un chapitel forrado de plomo y pizarra con una bola y una cruz arriba.

En su interior hay un cuadro de José de Ribera, Preparativos para la crucifixión (hacia 1630), ya que el Virrey de Nápoles (donde trabajaba el pintor) era el duque de Alcalá y le hizo muchos encargos. En 1986 unos desconocidos entran en la iglesia y roban el cuadro. Ocho meses más tarde la policía intercepta una furgoneta cerca de Bilbao y recupera la obra. Aunque en la época se dijo que el robo tenía que ver con operaciones terroristas, parece ser que el plan había sido preparado por el famoso ladrón de obras de arte Erik el Belga. La iglesia de Santa María se alza en la parte más alta de Cogolludo, al lado de lo que queda de su castillo. Muy cerca, según la creencia popular, la iglesia de San Pedro es refugio de cualquier delincuente que quiera encontrarse a salvo de la autoridad.

miércoles, 1 de junio de 2022

Galve de Sorbe


En la Sierra Norte de Guadalajara se encuentra Galve de Sorbe, pueblo de tradición nobiliaria. Su Plaza Mayor tiene en el centro un rollo del s.XVI (picota gótica, lugar de ajusticiamiento de los reos). Su ayuntamiento es aportalado y a lo largo del pueblo se ven casonas del s.XVIII. En su día el pueblo fue propiedad del Infante Don Juan Manuel y de los condes de Galve. La iglesia de la Asunción tiene origen en el XVI, pero tiene muchas reformas posteriores. Su puerta tiene tejadillo sostenido por dos columnas. 

En lo alto de un monte destaca su espectacular castillo, con su gran torre del homenaje, con pequeñas torres vigías en las esquinas. Llama la atención el dominio que se tiene desde ahí del valle del Sorbe y de la Sierra de Pela. Su interior tiene 5 plantas. En el s.XV su dueño era Diego López de Zúñiga y en el XVI, Baltasar Gastón de Mendoza, el primer conde de Galve. Hay una tradición ancestral de danzantes con colorido vestuario.