Una montaña con nieve, yo lo que quiero ser es una montaña y que me caiga mucha nieve encima y que me refresque, y que me limpie la piel y me calme los pensamientos nerviosos.
Hubo un tiempo feliz en que nevaba normalmente en el invierno y los ciclos climáticos eran previsibles. Ahora el tiempo se ha vuelto loco. No solo llueve poco y mal sino que, además, los calores son agobiantes y los fríos son intensos. Hemos trastornado el medio ambiente. En venganza, el medio ambiente nos ha trastornado a nosotros. Enviándonos enfermedades nuevas. De muy difícil curación. Y trastocando muchos planes de futuro.
Es mi sueño: ya no ser la montaña (que lo veo difícil), más bien solo contemplar la montaña y que me transmita toda la paz y la serenidad del mundo.
Mirar la montaña es hacerse ya montaña, en parte.
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