martes, 1 de octubre de 2013
Casa Paco
Francisco Morales Esteban llegó a Madrid desde Naharros (Guadalajara) en 1919 con diez años. Trabajó de taberna en taberna, hasta que en 1933 decide abrir un local en la Plaza del Carmen de Madrid, lugar donde nacería Casa Paco. En 1940 se anima a comprar un local situado en la Plaza de Puerta Cerrada, cita de vinos y conversaciones que ya existía desde 1870. Vino de Méntrida, carnes de cebón de buey y decoración taurina han sido las claves para que este rincón sea cita obligada de joyeros, carboneros, escritores y anticuarios. Huevos rotos, pisto manchego, callos a la madrileña y sopa de ajo, no faltan en el restorán del fondo. Pero en la barra de nogal labrada, lo que se tercia es pedir un blanco de Valdepeñas y una tapa de chicharrones. También tienen queso roquefot, queso manchego y croquetas de jamón.
A eso del mediodía del Miércoles de ceniza, en la esquina de Casa Paco se congregan las tropas lúdicas del madrileño Entierro de la Sardina, a modo de inicio de ese peculiar via crucis por los aledaños de San Antonio de la Florida. Chatos de vino y comida recia son la fórmula magistral de este bar, que ya regenta la tercera generación, su nieto David Francisco. "La buena comida, cuanto más sencilla mejor", decía el abuelo. Charlton Heston, Orson Wells y Marcello Mastroianni comieron aquí. Y se rodó la película El divorcio que viene.
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Has despertado mi interés por conocer esa taberna. Así que la próxima vez que vaya a Madrid (adoro esa ciudad ) pasaré por Casa Paco.
ResponderEliminarSaludos
Hace un siglo que no he vuelto. Pero también he estado aunque no me menciones.
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