jueves, 10 de octubre de 2013

La Casa del Abuelo


Situada en la calle Victoria, 12 y fundada en 1906, a La Casa del Abuelo hay que ir a tomar gambas a la plancha, al ajillo o en gabardina. Y a tirar las cáscaras al suelo, que es una de las características históricas del local. La base de su tapeo es concreta: gambas, langostinos o carabineros. Y combinaciones de ello (croquetas de gambas o banderilla de langostinos). En su origen, La Casa del Abuelo vendía rosquillas y vino dulce, después hubo una época en la que tuvieron un enorme éxitos los bocadillos de chorizo, anchoas y sobrasada, hasta que llegó la guerra civil y ante la escasez de pan, se les ocurrió ir al mercado a comprar gambas de Huelva y ahí estuvo la receta del éxito que dura hasta ahora.

Cada generación abrió otro local. En 1974, justo al lado, inauguran la de Núñez de Arce, 5. En 1996, la de Goya, 57. Durante una época se conoció también como La Alicantina, porque se fueron a Alicante a buscar un vino generoso, que es la nota dulce y peculiar del negocio (vino El Abuelo). Por lo visto, Andy Warhol era fan de La Casa del Abuelo. Remozado el interior, La Casa del Abuelo figura en las guías turísticas como sitio con encanto de Madrid, lo que le da ese aire cosmopolita en el que la esencia de la taberna tradicional se pierde a nada que te despistes.

3 comentarios:

  1. He pasado muchas veces por delante pero siempre está hasta los topes o es demasiado pronto para tomarse unas gambas. Insistiré.

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  2. El de la calle de la Victoria principalmente está siempre lleno de turistas pero, con todo, es el que tiene mas gracia.

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    1. Ayer pude pasarme por fin y tomar unas ricas gambas al ajillo, frescas y ricas. Gracias por la recomendación!

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