lunes, 12 de mayo de 2014
Olvera
Olvera es uno de esos encantadores rincones de la llamada Ruta de los Pueblos Blancos de Cádiz. Su perfil desde la lejanía con el castillo y la iglesia en lo alto es una de las estampas más bellas de la provincia.
La iglesia de Ntra.Sra. de la Encarnación es un edificio neoclásico construído en el s.XVIII sobre lo que fue una mezquita primero y una iglesia gótica después. Tiene una elegante estampa con sus dos torres gemelas en la fachada. El castillo es de origen árabe (foto desde la esplanada de la iglesia), data del s.XII y tiene una curiosa forma triangular por su necesaria adaptación al terreno triangular en el que se aúpa (623 metros de alto). A dos kilómetros se encuentra el santuario de Ntra.Sra. de los Remedios (patrona de Olvera), del s.XVIII sobre los restos de una antigua ermita del XVI.
Recorrer las callejuelas del Barrio de la Villa es retroceder un buen puñado de siglos de la historia (por ejemplo hasta 1327, cuando Alfonso XI conquistó a los moros el lugar). En el bar Nueva Alameda tomamos un exquisito plato de monte en adobo (al estilo de Sierra Morena) y, de postre, gachas. No hay que venirse de Olvera sin comprar aceite, con denominación de origen de la Sierra de Cádiz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Tomar un plato "al estilo de Sierra Morena" espero que no sea sin pagar, a la bandolera.
ResponderEliminar