Un aula arqueológica excavada en una roca (que se aprovecha como pared) ofrece una instalación didáctica con información sobre el arte rupestre. Además del piqueteado (puntos que delimitan el contorno de una figura), también se utiliza la incisión (finas líneas). Estos grabados fueron descubiertos en 1988 gracias a unos estudios arqueológicos que se estaban realizando en la zona.
martes, 5 de mayo de 2015
Siega Verde
Un aula arqueológica excavada en una roca (que se aprovecha como pared) ofrece una instalación didáctica con información sobre el arte rupestre. Además del piqueteado (puntos que delimitan el contorno de una figura), también se utiliza la incisión (finas líneas). Estos grabados fueron descubiertos en 1988 gracias a unos estudios arqueológicos que se estaban realizando en la zona.
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Espero que los grafiteros no se tomen esto como una legitimización de lo suyo.
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