lunes, 18 de abril de 2016

Diego Laínez


Diego Laínez nació en Almazán (Soria) en 1512. Descendiente de familia judía sefardita, estudió letras en Sigüenza, filosofía en Alcalá de Henares y teología en París, donde coincidió con Ignacio de Loyola. En 1534 varios compañeros, además de ellos dos, van a la capilla de los Mártires, en la colina de Montmartre para pronunciar votos de pobreza y castidad: es el germen de lo que llegaría a ser después la Compañía de Jesús. Diego fue siempre el Segundo General de la Compañía. En 1545 (y sesiones de años sucesivos) se celebra el famoso Concilio de Trento (convocado como respuesta a las reformas protestantes de la época) y allí se habla de que las Escrituras y las Tradiciones constituyen los pilares sobre los que se sostenta la Fe. Además se tomaron medidas para que el clero fuera más moral y más instruído.

En 1547 redacta la llamada "Carta de Laínez al secretario Juan Alfonso de Polanco sobre sus recuerdos de San Ignacio y de los primeros tiempos de la Compañía" (considerada la primera biografía del creador de los Jesuítas). En 1556, a la muerte de Ignacio, le sucede al frente de la Compañia y trabaja fundamentalmente en dos frentes: el impulso de los centros educativos y el apoyo a la labor en las tierras de Misión. Una estatua del mismo escultor de ésta que vemos en la Diputación se encuenta frente al Palacio de los Hurtado de Mendoza en la villa de Almazán. Diego Laínez murió en Roma en 1565. Sus restos reposan en la iglesia de San Francisco de Borja en la madrileña calle de Serrano.

2 comentarios:

  1. Un hombre muy instruido para su época. Supongo que el encuentro en París con Ignacio de Loyola marcó el resto de su vida. Muy interesante y entretenido relato.
    Saludos

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  2. La iglesia de San Francisco de Borja da un poco de yuyu pero le echaré valor y pasaré a verle.

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