miércoles, 8 de mayo de 2013

Monjas y escritores antiguos


El castillo de Medinaceli fue alcazaba árabe y actualmente hace las funciones de cementerio. Tiene una parte de fachada muy bien conservada y otra parte presenta derrumbes (con lo que te puedes aupar a los muros y ver las tumbas). El convento franciscano de Santa Isabel fue fundado en un palacio del s.XVI con una puerta de acceso de estilo hispano-flamenco, en el que el cordón de la orden adorna la puerta. Al lado está la iglesia de San Martín, que es donde las monjas oyen misa sin salir del convento, porque son clarisas de clausura. Antiguamente hacían alfombras, ahora hacen dulces.

Hasta 1939 hubo otro convento de monjas (jerónimas) que tuvieron que trasladarse a Andalucía y, desde entonces, el inmueble presenta ruina casi total. Es el Beaterio de San Román, que se encuentra en el barrio judío y que se cree tuvo un origen de sinagoga, pasando después a ser templo cristiano y en el s.XVI un beaterio que reunía en comunidad a mujeres aristócratas que se regían por unas normas de convivencia.
Paseando por las callejuelas y plazoletas de Medinaceli te encuentras con rincones llenos de encanto, como la plaza de Lamberto Martínez Asenjo (en la foto), hijo de la villa, abogado y diputado de finales del s.XIX autor del libro "Relaciones entre la Iglesia Católica y la propiedad".

También hay aquí un monumento dedicado a Ezra Pound, poeta estadounidense de la generación perdida y seguidor de Mussolini. "Aún cantan los gallos al amanecer en Medinaceli" (frase que recuerda su visita a la ciudad en 1906,  fascinado como estaba por las tierras recorridas por el Cid).

1 comentario:

  1. Hace mucho que no me acerco a Medinacelli que me encanta. Tuve amigos por allí que ya no están y me animo menos a ir. Pero siempre busco su arco romano cuando paso por la carretera camino de Barcelona y paro en las tiendas de abajo a comprar bollería de regreso a Madrid. Un finde me subo a comer. Cuántos recuerdos me has traido.

    ResponderEliminar