lunes, 1 de marzo de 2021

Humedad y especias


En el año 2007 visitamos la India. Me gusta más escribir visitar que conocer, ya que éste fue un viaje de tan solo ocho días, en los que recorrimos el llamado triángulo cultural Delhi-Jaipur-Agra. Cuando sales del aeropuerto a la calle, hay algo que quedará grabado para siempre: un calor húmedo y un olor a naturaleza especiada. Como si el aire arrastrara cúrcuma. La señal de que estás en otra parte. Nos ofrecen un collar de flores anaranjadas y la promesa de visitar rincones de Delhi en los que apreciar las diferentes ritmos de vida social y espiritual. Vacas y rickshaws (taxis-bicicleta) aparecen cuando menos te lo esperas. En la Old Delhi, en los alrededores de la mezquita musulmana, todo el ruido del movimiento popular de las callejuelas (foto). En la New Delhi, el dinamismo de una moderna ciudad con enormes avenidas. En el norte del país, esta ciudad tiene una historia de 3.000 años.

En 1947, después de siglos de dominio británico, la India se independiza como estado soberano. Mil trescientos ochenta millones de almas viven en un verdadero pequeño continente, donde el norte no tiene que ver nada con el sur. 

1 comentario: