Antes de entrar a Viana do Castelo, resulta muy agradable subir hasta el Monte de Santa Lucía para visitar el templo del Sagrado Corazón (s.XX) y contemplar desde allí las vistas de la ciudad. La catedral es del s.XV y tiene en su portada seis esculturas de apóstoles, presentando un aspecto macizo, con dos impresionantes torres a los lados. La Casa de los Nichos es de la misma época y tiene esculturas góticas en la fachada (funciona como museo arqueológico). La iglesia de la Misericordia (foto) es del s.XVI y tiene influencias italianas y flamencas en su fachada con varandas. Dentro son maravillosos los frescos del techo pintados por Manuel Gomes.
En Maria de Perre te ofrecen unos entrantes (pasteles de carne y croquetas de bacalao), una lubina (Viana mira al Atlántico), un vino verde Muralhas de Monçao y, de postre, una rabanada (una especie de torrija con frutos secos picados encima). Todo por 20 euros. La iglesia de San Domingo, del s.XVI, tiene unos bellos altares de talla dorada y el Fuerte o castillo de Sao Tiago de Barra fue edificado en tiempos del Manuel I (el de los elementos arquitectónicos manuelinos). No hay que irse de Viana sin entrar en la confitería Natário y pedir una bola de Berlim acompañada de una copita de Oporto.
Me maravillo de que recuerdes tantas cosas teniendo en cuenta que en cada lugar te pimplas una copita típica. Aprovecho para felicitarte por esa preciosa cabecera de Oporto la noite.
ResponderEliminarPortugal y el bacalao, el bacalao y Portugal, una cuestión en común entre los Lusitanos y los Catalanes.
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