domingo, 31 de enero de 2016

Monasterio de la Oliva


El Monasterio de la Oliva (Navarra) fue fundado en el año 1134 por el rey García Ramírez con la normativa cisterciense de monjes que provenían de Francia. Durante toda la Edad Media vivió una época de esplendor con influencias económicas, culturales y sociales en toda la zona. La iglesia tiene tres naves y mezcla elementos románicos y góticos. En la cabecera tiene cinco capillas, la mayor semicircular y las otras, cuadradas. La fachada, con unos bellos rosetones por los que entra la luz, está coronada con una torre renacentista. El claustro actual (s.XIV) es una reconstrucción del que hubo en el s.XII (época de la sala capitular, lugar de reunión y discusión de asuntos de gobierno). Apenas se conservan restos de lo de lo que fueron las habitaciones y el refectorio, pero las ruinas están consolidadas en un sugerente jardín.

Desde la llegada de aquellos antiguos monjes franceses, se hace vino aquí. Las uvas decoran capiteles del claustro y otros elementos ornamentales. En la tienda que tienen los monjes compramos dos botellas, una de tinto y otra de rosado, Abadía de la Oliva (Carcastillo). Nada mejor que brindar por la vida, espiritual y corporal, que nos regaló este delicioso viaje por tierras de la Navarra Media Oriental y las Cinco Villas de Zaragoza.

sábado, 23 de enero de 2016

Sádaba


Pueblo de llanura, Sádaba (Zaragoza) tiene un castillo del s.XIII con unos muros muy altos. Por un lado mide 38 metros y por el otro 30, destacando sus impresionantes torreones, un total de siete, cuatro de ellos en las esquinas. Es un buen ejemplo de arquitectura militar cisterciense. La iglesia de Santa María es gótica, del s.XVI. Su portada y su torre altiva destacan a medida que te vas acercando al monumento. Es de nave única, a la que se le añadieron dos capillas junto al presbiterio.

Está constatada la presencia de los romanos en Sádaba, ya que hay un templo sepulcral en piedra arenisca. En el paseo por Sádaba te encuentras numerosas casas solariegas que dan testimonio de la época señorial que vivió la villa. El Canal de las Bardenas, que pasa cerca, permite que esta sea una zona de regadío para la agricultura.

domingo, 17 de enero de 2016

Uncastillo


6 iglesias románicas tiene Uncastillo (Zaragoza). Pueblo medieval de rico patrimonio enclavado en la línea de fortificaciones aragonesas, apenas queda la torre del antiguo castillo que también fue palacio gótico de Pedro IV. El interesante Centro de Arte Religioso del Prepirineo se encuentra en la iglesia de San Martín (s.XII) y tiene escultura, pintura, retablos, orfebrería y objetos de iglesias de los alrededores. Un estupendo documental y una iluminación muy cuidada contribuyen a que la visita a este museo sea una verdadera experiencia espiritual. La iglesia de Santa María (s.XII) tiene una portada (foto) rica en esculturas, un claustro y una torre esplendorosa. En la de San Juan, edificada sobre un promontorio, hay una necrópolis alto medieval. La de San Andrés es ya renacentista y tiene en la fachada el escudo del obispo que la mandó construir y, al lado, un antiguo hospital.

El ayuntamiento de Uncastillo es del s.XVI y parece italiano. En su fachada están representadas las virtudes (en referencia a los principios morales que debe tener un buen gobernante). El suelo de su patio está hecho de cantos rodados. En el paseo encuentras numerosas casas señoriales y callejuelas de la antigua judería.

sábado, 16 de enero de 2016

Sos del Rey Católico


A un paso de la Zona Media Oriental Navarra se encuentra la comarca de las Cinco Villas (Zaragoza). Se trata de las poblaciones históricas de Sos del Rey Católico, Uncastillo, Sádaba, Ejea de los Caballeros y Tauste. Nosotros visitamos las tres primeras, dejando para otra excursión las dos últimas. En el año 1452 nacía en Sos (por expreso deseo de su madre, que quiso que el niño naciera en Aragón en vez de en Navarra) el que  luego sería Fernando II de Aragón. Aquí se visita el Palacio de Sada, el lugar donde vio la luz y te ponen un audiovisual contando su vida.

En el recorrido por Sos te encuentras: el barrio judío (con su coqueta plaza de la Sartén como centro), la lonja medieval, la iglesia de San Esteban (con una cripta en la que destacan unas pinturas del s.XIV), la plaza de la Villa (foto) donde destacan el edificio renacentista del ayuntamiento, un colegio y unos soportales donde hay una columna con una hendidura para colocar la balanza del mercado, la torre del homenaje del castillo del s.XII y el Palacio de los Español del Niño (con el suelo del patio construído de cantos rodados). Como ciudad amurallada que fue, todavía se conservan siete portales de acceso. En el año 1985 se rodó en Sos la película La vaquilla, de Luis García Berlanga.

En el Hostal Las Coronas degustamos una estupenda comida que consistió en garbanzos (con cigala), sepia (con borraja) y helado frito. No te puedes venir de Sos sin entrar en la Pastelería Puente y comprar una tableta de chocolate Santa Orosia o, en la época en que la visitamos, su delicioso turrón artesano.

martes, 12 de enero de 2016

Monasterio de Leyre


El Monasterio de Leyre situado en Yesa (Navarra) es una de las joyas del románico español. Se tienen referencias de él ya en el s.IX,  se consagra en 1057 y su época de esplendor se vive en los siglos XI y XII.  En su exterior destacan sus tres magníficos ábsides y su torre.  En su interior sorprende su fabulosa cripta, con columnas muy bajas sostenidas por robustos capitales (foto). En un muro de la iglesia se encuentra el Panteón Real,  protegido por una reja del s.XIV. Aquí descansan en un arca de madera los restos de los primeros reyes de Navarra (el primero sería Sancho Garcés entre el 804 y 824). La Porta Speciosa es del s.XII y está compuesta de tres columnas a cada lado rematadas por hermosos capitales y un tímpano con el Salvador, la Virgen, San Pedro, un escriba y dos apóstoles. Es sorprendente la talla del Cristo de Leyre (s.XVI).

Monjes benedictinos viven en el llamado monasterio nuevo, buscando intimidad respecto a la hospedería para visitantes (hotel) y fanáticos de la meditación (clausura), en este paisaje delicioso muy cerca de los Pirineos. Ya en el año 848 San Eulogio escribió desde Córdoba las impresiones que tuvo al visitar estos parajes. Cuenta la leyenda que San Virila, abad de Leyre en el s.X, salió un día a pasear y fue tal el éxtasis que vivió que cuando regresó habían pasado ¡tres siglos!, lo que se interpreta como una lección divina sobre el misterio de la eternidad.