lunes, 15 de agosto de 2016

Fuente del Ídolo


Paseando por las calles de Braga (Portugal) encontramos muchas sorpresas. La antigua ciudad romana Bracara Augusta, todavía late en el corazón subterráneo de la actual ciudad moderna. En la Rua Raio, muy cerca de la espectacular Casa do Raio o del Mexicano (de estilo rococó con fachada cubierta enteramente de azulejos), la puerta de lo que parece un pequeño museo nos adentró ni más ni menos que a principios del s.I y, concretamente, a un santuario rupestre o lugar de culto con dibujos y mensajes en piedra. En una roca granítica de metro y medio de altura hay una figura en alto relieve que representa a un personaje togado que sostiene en la mano un objeto (parece un cuerno de la abundancia). Hay una inscripición que se ha traducido como "Célico Fronto, procedente de la ciudad de Arcóbriga y perteneneciente al grupo étnico de los Ambimógidos, modeló lo que aquí se ve". Al lado hay esculpido un templete con un busto en su interior. También puede leerse el nombre de la divinidad a la que está dedicado el monumento: Tongoenabiago (el dios prerromano del agua).

Diferentes autores plantean diferentes interpretaciones: no está claro qué imagen correponde al dedicante y cuál es la que se identifica con el dios dedicado. Incluso las dos imágenes pueden ser de dioses y el nombre del que lo mandó construir solo aparezca en la inscripción. Parece ser que se trata de un ejemplo de obra pública para usufruto de la comunidad, en un claro ejemplo de altruísmo.


1 comentario:

  1. Qué cosa curiosa. No puede seer que yo no conozca Braga (dicho sea sin dobles lecturas)

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