domingo, 30 de septiembre de 2012

Mercado de Santa Caterina


En el barrio de la Ribera de Barcelona, se inauguró en 1848 el primer mercado que suministró de una forma organizada comestibles a la población. Este mercado ocupó los solares que correspondían al convento de Santa Caterina derribado en el año 1835 por un incendio. Los dominicos tenían un convento cerca de la plaza de Sant Jaume que se les quedó pequeño y pronto (finales del s.XIII) decidieron buscar unos terrenos donde construir un monasterio más grande. Buscaron unos edificios entre los que estaba incluída una pequeña capilla dedicada a Santa Catalina, donde se construyó con el tiempo un hermoso claustro, algunas de cuyas piedras todavía pueden verse actualmente.
Lo que ahora vemos es el Mercat de Santa Caterina, inaugurado en el 2005 y diseñado por los arquitectos Enric Miralles y Benedetta Tagliabue, siendo uno de sus diseños más características la cubierta colorida de Toni Comella. Desde el barrio gótico hay que traspasar la Via Laietana a la altura de la plaza de Antonio Maura y enseguida se ve.
Además de puestos de mercado tradicional y pequeñas tiendas delicatessen, también está el restaurante Cuinas de Santa Caterina, donde te puedes comer un exquisito plato de butifarra con judías de Santa Pau y foie, acompañado de una copa de vino blanco del Penedès Petit Caus y una cestita de exquisitos panes por 16,55 euros. Te lo puedes tomar en la barra, mientras ves como te lo están preparando allí mismo.

2 comentarios:

  1. Nunca he conseguido comer nada allí. Siempre a rebosar.
    Supongo que es un problema mas del exceso de turistas en Barcelona.
    Afortunadamente hay muchos otros lugares en la zona donde comer bien.

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  2. Mongetes, nen, mongetes, jajajajaja

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