martes, 9 de abril de 2013

Palacios renacentistas


Nuestro recorrido cacereño finaliza en Pasarón de la Vera, que tiene la iglesia del Salvador (s.XV) con la peculiaridad de mostrar la torre fuera del recinto del templo, a unos diez metros. Además de su retablo, destaca una hermosa imágen gótica de un cristo crucificado. También nos llamó la atención el Palacio de los Condes de Osorno, edificio renacentista de los Manrique de Lara, que comenzó a construirse en 1531 por el maestresala del Emperador Carlos V, destacando en su imagen las galerías en arcada, las chimeneas y los balcones.
Pasarón tiene una bonita calle Real con palacetes y un rollo jurisdiccional en la Plaza de España. Además visitamos el Museo Pecharromán, dedicado a la figura del pintor figurativo madrileño Ricardo Pecharromán, que personalmente se encarga de enseñarte las dependencias de su casa, un palacio eregido igualmente por los Manrique de Lara (está claro quién mandaba en Pasarón) en el s.XVII. Es una casa con bodegas, planta de acceso, principal y estudio (dependencias abuardilladas con una gran solana o balcón cubierto que conserva las baldosas originales). El bueno de Pecharromán te enseña sus cuadros y te los explica, buscando con las palabras la intención de la brocha.
No nos fuimos de Pasarón sin comprar chorizo, salchichón y queso de cabra.

2 comentarios:

  1. Qué pena dejar Cáceres. Claro que por lo que veo no os fuistes ligeritos de equipaje.

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  2. Un estilo artístico tan escaso en España. Es como si el Renacimiento hubiera pasado de largo.

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